[Bien, este blog ha cerrado un acuerdo de publicidad con el avatar de cabeza de conejo, Besa, para difundir las bondades de sus creaciones literarias. Creedme que no he tenido más remedio que aceptar insertar algunos anuncios (estoy atado de pies y manos). Lo más triste del caso es que este no es el último. Creedme que lo siento.]
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Hola IA, ¿cómo te va?. Tal como kedamos, me publicas esto (respeta las tipografías, el subrayado y negrita es para enfatizar, una idea que se me a ocurrido). Espero k salga como es debido o no te pago. Si no hay un mínimo de 20 c, te va a pagar tu puta abuela. Un saludo, Besa.
Muy queridos amigos míos.
Sabido es que los amigos se conocen en que van a verte al hospital, la cárcel y a las presentaciones de libros. Este viene a ser el caso. El 30 de enero semipresento Insula Avataria en la librería Fuentetaja (Madrid) y en el marco del I Encuentro Nacional Anika Entre Libros en Madrid. Por supuesto, estáis invitados.
Ahora bien, sin duda, estaréis pensando que el rata del Besa os ha preparado una encerrona para apoquinar (coloq. vulg.: “Pagar o cargar, generalmente de mala gana, con los gastos que a uno mismo le corresponden” -RAE-) otros 20 euros por su nueva novela, ¡como si no hubiera tenido ya bastante en 2007 con Metaversos!
Os equivocáis.
Lo de sacaros los cuartos para encolomaros Insula Avataria será otro día. Lo juro por la salud de mis abuelos. Lo del 30 es gratis total y está concebido como un acto promocional, aprovechando la amable iniciativa de Anika. Entre otras razones, es gratis porque no estaba previsto tener el libro para tan prontas fechas, de hecho, Insula Avataria (IA) se empezará a vender a finales de febrero. La presentación buena-buena, con tías, tíos, cuñados, la santa de la niña vendiendo libros y mi señora a la puerta ataviada de Aguedera con la bandeja de tajadas y torreznos –bueno, mejor de esto no digáis todavía nada, que lo estoy negociando- la haré en algún sitio friki de Segovia allá por abril (avisados quedáis). Acto seguido me embarcaré en un road show con paradas en San Fernando (Cádiz, coincidiendo con la primera comunión de mi sobrina), Torredembarra (oh sí, colegas de la playa, esta vez no os escaqueáis), Mollerussa, Cuéllar y, está en cuestión, Benasque y, en función del presupuesto Mahón (pronúnciese Mò).
Os preguntaréis cómo es eso de acudir a conocer un libro con la comodidad de no tener que comprar el libro al final del evento. Pues veréis, el editor y yo, muy preocupados por la merienda de negros en que habían quedado estas presentaciones, no hemos parado mientes en fórmulas imaginativas que permitan al amigo, envidioso, compromiso o fulano potencial lector, asistir al acto con la comodidad de no tener que comprar el libro al final del evento. Digo esto porque -os sorprenderá saber- mucha gente, en lugar de atender al orador, se tira los 30 minutos de la presentación en una salvaje y destructiva pugna interior del tipo “¿Por qué cojones le voy a comprar el libro a este payaso? Ni siquiera me cae bien, joder. Y 20 euros son 20 euros, joder… Por otra parte, quedaré como una rata si me hago el loco con el Besa, él, que vino a la presentación de mi incomprendida novela Conan Presidente... Me cagón la leche puta, y ¿ahora qué hago?…”
Muy queridos amigos míos.
Sabido es que los amigos se conocen en que van a verte al hospital, la cárcel y a las presentaciones de libros. Este viene a ser el caso. El 30 de enero semipresento Insula Avataria en la librería Fuentetaja (Madrid) y en el marco del I Encuentro Nacional Anika Entre Libros en Madrid. Por supuesto, estáis invitados.
Ahora bien, sin duda, estaréis pensando que el rata del Besa os ha preparado una encerrona para apoquinar (coloq. vulg.: “Pagar o cargar, generalmente de mala gana, con los gastos que a uno mismo le corresponden” -RAE-) otros 20 euros por su nueva novela, ¡como si no hubiera tenido ya bastante en 2007 con Metaversos!
Os equivocáis.
Lo de sacaros los cuartos para encolomaros Insula Avataria será otro día. Lo juro por la salud de mis abuelos. Lo del 30 es gratis total y está concebido como un acto promocional, aprovechando la amable iniciativa de Anika. Entre otras razones, es gratis porque no estaba previsto tener el libro para tan prontas fechas, de hecho, Insula Avataria (IA) se empezará a vender a finales de febrero. La presentación buena-buena, con tías, tíos, cuñados, la santa de la niña vendiendo libros y mi señora a la puerta ataviada de Aguedera con la bandeja de tajadas y torreznos –bueno, mejor de esto no digáis todavía nada, que lo estoy negociando- la haré en algún sitio friki de Segovia allá por abril (avisados quedáis). Acto seguido me embarcaré en un road show con paradas en San Fernando (Cádiz, coincidiendo con la primera comunión de mi sobrina), Torredembarra (oh sí, colegas de la playa, esta vez no os escaqueáis), Mollerussa, Cuéllar y, está en cuestión, Benasque y, en función del presupuesto Mahón (pronúnciese Mò).
Os preguntaréis cómo es eso de acudir a conocer un libro con la comodidad de no tener que comprar el libro al final del evento. Pues veréis, el editor y yo, muy preocupados por la merienda de negros en que habían quedado estas presentaciones, no hemos parado mientes en fórmulas imaginativas que permitan al amigo, envidioso, compromiso o fulano potencial lector, asistir al acto con la comodidad de no tener que comprar el libro al final del evento. Digo esto porque -os sorprenderá saber- mucha gente, en lugar de atender al orador, se tira los 30 minutos de la presentación en una salvaje y destructiva pugna interior del tipo “¿Por qué cojones le voy a comprar el libro a este payaso? Ni siquiera me cae bien, joder. Y 20 euros son 20 euros, joder… Por otra parte, quedaré como una rata si me hago el loco con el Besa, él, que vino a la presentación de mi incomprendida novela Conan Presidente... Me cagón la leche puta, y ¿ahora qué hago?…”
Foto de Archivo, el autor en la presentación de
"Pa, pe, pi... Deconstruyo. Apuntes de Estructuralismo
Para Educación Primaria", Huesca 1982.
Mi editor y yo sabemos el sufrimiento interior y el estrés que generan este tipo de situaciones.
Y he aquí que, singularmente en la histora de las presentaciones de libros, no sólo no habrá el menor compromiso de comprar el libro si no que absolutamente todos los presentes hasta el número de los primeros 30 recibirán –atención- un magnífico folleto numerado en tirada única y limitada con unos tres capítulos de Insula Avataria… ¡de forma completamente gratuita! Sí, sabemos que seremos criticados, que nuestro romanticismo y amor al libro no recibirá más que la hiel despectiva del materialista. Pero que le vamos a hacer… somos así, despreocupados, libres y absolutamente dispuestos a todo sacrificio por elevar la salud moral de nuestros conciudadanos (nada nos detendrá en tan patriótico empeño).
Insistiendo en que disfrutaréis de la comodidad de no tener que comprar el libro al final del evento, os emplazo.
Ahora bien –y ya termino-, ¿quiere decirse –os pregunto a todos- que aquel que quisiera invertir en libros no podrá hacerlo?
No lo quiera Dios.
Para empezar estamos en el I Encuentro Nacional de Escritores Anika Entre Libros en Madrid, donde además de este humilde servidor, encontraréis presentaciones de autores desde las 10 a las 14.40 horas (aunque no tan vanguardistas como la mía), los más de ellos con interesantes novelas. Pero además, durante toda la jornada, podréis comprar libros de la librería Fuentetaja, la más antigua de Madrid. Y entre estos libros, podréis comprar nuevamente Metaversos…
Y sí, me diréis, yo ya te compré el jodido Metaversos… Lo sé, lo sé… ¿Pero habéis pensado en lo bonito y armonioso que quedan dos libros exactamente iguales en la biblioteca doméstica?
Bueno, pensadlo.
NOTA: En el improbable caso que no conozcáis Anika Entre Libros, sabed que es la web de referencia para novedades editoriales, y muy especialmente nóvelas de género, coordinada por su realmente amable directora Anika Lillo (http://libros2.ciberanika.com/), impagable difusora de nuestro trabajo.
El programa entero de los encuentros.
Y recordad, con la comododidad de no tener que comprar el libro al final del evento.
4 comentarios:
Hola
Soy administradora de un directorio y tengo que decir que me ha gustado su página Vida sexual de una IA. Por ello, me encantaría contar con tu sitio en mi directorio, consiguiendo que mis visitantes entren también en su blog.
Si estás de acuerdo. Házmelo saber, nayade.narvaez@hotmail.com.
Suerte con tu blog y que tengas una excelente semana!
Obviamente, la comodidad total consistiría en garantizar la absoluta ausencia de presiones posteriores para comprarlo alguna vez (duro decirlo, pero...).
No solo eso sino que, posteriores outputs informativos de la IA, vendrían a resaltar la no poco esperada ganancia -sí, ganancia- cognitiva derivada del hecho de abstenerse de la lectura de Ínsula, así como la paz espiritual resultante.
Pero NO es ese el universo en que queremos vivir. La portada es resultona, la sinopsis leída por ahí es atractiva, el autor tiene la suficiente cara de bordejo buscavidas con pendencias en la niñez (juasjuas)...En fin.
Vamos, que los ingredientes para un buen cocido están completitos y para Febrero Glorioso caerá un ejemplar, ejemplo que espero sigan muchos.
Ah, pero quiero mis canapés por correo, que no podré asistir al happening ese...
Bueno, lo de pendencias en la niñez puede ser, le expulsaron de algunos sitios, tengo entendido...
Ahora, en lo de cara de bordejo, a mí no me lo parece en absoluto (le encuentro resultón e interesante)
Un libro además tiene usos multiples. En Sirius están muy interesados en constructores que quieran utilizar Insula Avataria como aislamiento térmico. (Llevan el palet a pie de obra en 48 horas) Ya hablaremos ya... ¿Por qué esa manía de que los libros son sólo para leer? No es lógico.
Es que teneis razón, ¿Como va a funcionar el video libro este?
Un libro, aparte de cultura sirve como aislante. Y alguno que otro tambien sirve para encender el fuego (siempre y cuando se conserven los 5 ejemplares pertinentes del depósito legal). El video libro no se puede prender fácilmente con el mechero, ni sirve de aislante de paredes, ni como alzador para los niños jóvenes en la mesa.
Hacen mal los ciclistas en ponerse un periódico en los descensos. Deberían ponerse unos cuantos libros bajo el mallot. No solo protegen más sinó que se baja mucho más rápìdo.
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