martes, 18 de diciembre de 2012

Malthus, apocalipsis y "Peaks Oil"


No es que lo diga yo, pero Malthus se equivocaba.

Hoy sabemos que sus planteamientos demográficos sobre los recursos son falsos. A diferencia de los cultivos bacteriológicos, la demografía humana no sigue patrones expansivos en función de los recursos. Seguir sosteniendo esto en la actualidad es como afirmar que el mundo es plano.

Por otro lado, también sabemos que no se pueden globalizar proyecciones económicas sin atender a la diversidad regional (no es el mismo resultado el efecto económico del calentamiento global en China que en Canadá). Apenas nadie cree hoy en los reduccionismos históricos.  Muy importante me parece, también, el punto de partida que Malthus, siguiendo a Ricardo, tomaba para definir el valor económico de un bien: su coste de la producción (frente al modelo hoy paradigmático de la oferta y la demanda).

A pesar de tantas evidencias, y especialmente entre los biólogos, el maltusianismo se resiste a morir y ya desde hace unos cuantos años se plantea un “neomalthsuianismo” donde la producción de alimentos queda sustituida por la dependencia energética.
El neomalthusianismo augura que, a semejanza del colapso alimentario supuestamente surgido en algunas —muy pocas— regiones que practicaban el monocultivo, y por tanto, máximamente dependientes de un recurso, nuestra sociedad tiene una monodependencia energética respecto al petróleo. Como el petróleo se agota, nuestro modo de vida está abocado a un colapso malthusiano. En general, se apuntala esta profecía en el “peaks oil” y la tasa de retorno energética del petróleo, según las cualesllega un punto en que la energía que extraemos restada de la invertida en su extracción torna inviable un determinado tipo de aprovechamiento energético.

Visto desde la perspectiva malthusiana de producción, estas predicciones podrían tener un cierto respaldo. El problema .al igual que sucedía con el modelo demográfico- es que ignoran deliberadamente los mecanismos de transferencia y equilibrio basados en la oferta y la demanda. Es por eso que los economistas no suelen tomarse en serio los planteamientos neomalthusianos. No puedes pretender a estas alturas de la vida ignorar que el mundo es redondo.

En cambio, si aplicamos un modelo de gestión de la energía en términos de oferta y demanda comprendemos:
A/ porque la economía fluctúa
B/ porque los sistemas económicos tienden habitualmente al equilibrio  y prácticamente nunca al colapso sistémico (que sería lo suyo, considerando la codicia humana).

Asimismo, aplicando un modelo de oferta y demanda obtenemos que la sustitución del petróleo como energía primaria no es que sea viable, es que es una realidad. Las agoreras predicciones de que en el año 3000 el mundo habrá vuelto a una economía de cazadores recolectores no tienen la más mínima consistencia (o no al menos basada en argumentos económicos).

En cambio, sí las tienen las predicciones que apuntan a la capacidad de una economía compleja para asimilar un drástico cambio de modelo.

Uno de los defectos de ignorar oferta y demanda en la producción energética es considerar verdades inamovibles tal que una fuente energética es inviable cuando su extracción consume más (en términos energéticos) que la cantidad de energía resultante. Depende.

Así pasa, por ejemplo, con el hidrógeno. Para trabajar con el hidrógeno hay que invertir mucha energía en el proceso osmótico que lo separa del agua, y todavía más energía para someterlo a una presión susceptible de voluminizarlo a unos niveles operativos. Y todavía más energía para construir recipientes que lo contengan. En realidad, el hidrógeno no es una fuente de energía, es más bien un reservorio energético.

La viabilidad energética del hidrógeno —es el mismo caso que la electricidad, y si me apuran, del petróleo— depende pues de la existencia de una fuente primaria de energía renovable. Lo que hacemos —por ejemplo con una pila de combustible— es utilizar excedentes energéticos (sobrantes de oferta) para acumularla con vistas a su ulterior empleo (demanda). En este modelo el TRE pierde importancia; lo único que importa es la gestión del excedente energético. La consecuencia inmediata de este planteamiento es desmentir algunos tópicos como que no es viable extraer petróleo a partir de según qué umbrales de inversión energética. Esto depende y dependerá de la oferta y la demanda a que destinemos esa energía.

Visto esto, analicemos ahora a la oferta.
Hay razones para pensar que el petróleo está lejos de agotarse, básicamente, porque los cálculos sobre reservas se basan en yacimientos accesibles desde la plataforma continental. En tres cuartas partes del planeta, sin embargo, el proceso extractivo no ha hecho sino que empezar.  La clave para extraerlo parece, una vez más, referida a costes extractivos. Evidentemente, no cuesta lo mismo bombear petróleo desde tierra  firme que desde una plataforma flotando a miles de metros de la bolsa. Pero haberlo haylo. El problema sigue siendo la gestión del excedente (si es que lo hay).

Y pasemos a la demanda. Actualmente el 40% del petróleo se despilfarra como energía de climatización, el 50% como energía locomotriz, el resto, para la obtención de elementos vitales como fertilizantes, herbicidas, plásticos…

Del petróleo utilizado para su conversión en temperatura poco hay que decir, en los años 50 Inglaterra pasó de calentarse de carbón a gasóleo en unos pocos años (en algunas áreas, en apenas meses). No hay razones para pensar que con la tecnología disponible no se pueda reemplazar en cosa de meses el actual e intolerable despilfarro de materia fósil. De hecho, en algunas regiones el cambio resulta ya imparable.

Es el caso del Pelet, por ejemplo. Nuevamente, está triunfando el modelo oferta—demanda sobre el modelo coste energético, pues aún hoy cuesta mucho más en términos energéticos calentar un casa con madera que con gasóleo… Sin embargo, en términos económicos cuesta una tercera parte. ¿Por qué? Por la sencilla razón que el pelet tiene unos ciclos de reposición de años y el gasóleo de millones de años. El petróleo escasea y el pelet abunda. Esta es la clave del asunto. La gestión del estocaje. Y toda gestión de stock remite al ciclo de renovación de las existencias.

Queda el transporte  y quedan determinados procesos agrícolas cuya sustitución es teóricamente posible pero, a decir verdad, muy compleja. Yendo al transporte, por ejemplo, otra tendencia imparable es el cambio en el modelo de distribución. Las tecnologías de la comunicación permiten hoy un flujo directo del productor al consumidor final, dividiendo en bastante los portes logísticos. Para el laboreo, tan dependendiente hoy del gasóleo, igualmente se están implantando estrategias de eficiencia (especialmente en el cereal, donde se precisa mucha fuerza motriz). En cuanto a herbicidas y fertilizantes, tan necesarios, existen igualmente alternativas, desde el reciclaje al cultivo transgénico, pero lo más previsible es que, dentro de unos años, la obsolescencia de determinadas consumo sde petroderivados lo convierta en un problema menor (a semejanza, por ejemplo, de lo que ocurre con los fosfatos, cada vez más reemplazados por compost y nitratos de origen residual).

A tener de las reservas disponibles, estamos ya en la bajada de la curva del peak oil. No obstante, los precios internacionales (nada que ver con los latrocinios perpetrados por los estados europeos) siguen una tónica de estancamiento—descenso desde 2008. En Europa y con la población en aumento, la caída del consumo es de un espectacular 17% desde 2005. Este ritmo de descenso está llamado a intensificarse en los próximos años, conforme la distribución comercial reduzca costes y accedan al mercado del automóvil motores más eficientes o incluso renovables.


Oferta y demanda. De hecho, el paso de la sociedad de consumo al de la eficiencia es lo que late en el único renacimiento empresarial de Europa viable: hay mucho más crecimiento en el sector de la eficiencia que en el del consumo.

Pero ciertamente queda un frente donde la sustitución del petróleo genera una enorme incógnita: la guerra.
En efecto, desde la IIGM, el petróleo es la materia prima de las balas. Gracias al petróleo, occidente ha consolidado una superioridad bélica incontestable. Habrá que ver cómo afecta al statu—quo internacional la nueva situación. ¿Podrá Occidente seguir  liderando misiones militares de consolidación del orden internacional? Personalmente pienso que el encarecimiento de costes de la aviación militar y del despliegue de vehículos pesados va a imposibilitar el mantenimiento de ejércitos nacionales realmente operativos, potenciando en su lugar la efectividad de cuerpos internacionales altamente tecnificados. En otras palabras, la guerra convencional basada en ejércitos permanentes será tan cara que solo estará al alcance de un pool de países. Eso simplifica enormemente la defensa tanto de los recursos como de las fronteras y lo que es más importante, el advenimiento de un Orden Jurídico Internacional real.

¿Optimismo? En modo alguno, sea lo que sea, la sociedad de la eficiencia no será mejor, ni más sabia, ni más justa que la sociedad del consumo. El progreso no depende de la economía y sí de los valores éticos. Y por ahí es donde verdaderamente suelen colapsar las sociedades humanas. Ahora, tonterías apocalípticas, las justas.

miércoles, 12 de diciembre de 2012

Eva



Así pues, compartía prisión en aquella caricatura de Paraíso con los seres elementales, obsesionados por comer y aparearse. Adocenados entes sin belleza que dejaban a su paso un rastro de orines y excrementos.

De entre todos ellos, pensaba Lucifer, Eva es la peor.  Le dolía su mirada, incriminatoria y procaz, permanente recordatorio de su condición asexuada. La más ordinaria reclusa de los Siete Valles. Adán, inhiesto, le mostraba una papaya y Eva se abría de piernas hasta desgarrarse la carne. El resto de animales huía ante otra previsible sesión de bramidos y jadeos.  Pero Lucifer no. Él no era de esa pasta. Oculto, espiaba los cuerpos enzarzados…
¡Qué manera de copular!...

“¡Basta!”, exclamó Lucifer, y sus manos se posaron en la corteza del Árbol de la Ciencia. Al punto le invadió la lucidez: “de todas los castigos por Dios impuestos, es la envidia el que peor sobrellevo”, pensó. Pero las cosas iban a cambiar radicalmente.
Lucifer no se quedaría solo en la caída.

domingo, 2 de diciembre de 2012

Preguntas más Frecuentes

¿Cuántos años vive una sanguijuela?
27 años de media. Y cualquier persona culta coincidirá en que resulta tan sorprendente como poco meritorio.

¿Es la nada algo?
Si la nada es nada entonces predicamos de un sujeto una cualidad X, por tanto, nada es el atributo de nada, por cuanto la nada se queda sin nada y no deja de serlo (Fridegiso de Tours). Los partidarios, en cambio, de que la nada es nada, apuntan a su carácter lógico de negación; la nada es una relación negadora de relaciones. Hay quien apunta, también, que la nada es el conjunto de los conjuntos que no se contienen a si mismos.

¿Quién ha sido el peor presidente español del mundo?
Felipe González, Aznar, Zapatero, Rajoy...

¿En qué fechas celebran su onomástica las Vanesas?
De momento, las Vanesas no han sido suficientemente virtuosas como para contar con una santa en el santoral católico (en este blog no se admite otro). Por convenio, se celebra el 8 de diciembre, aunque algunas lo celebran también el 1 de diciembre.

¿Debería ser esto así?
En absoluto. El nombre de Vanesa deriva del acrónimo inventando por el deán Jonathan Swift para referirse a su musa Esther Vanhomrigh en el poema galante Cadenus and Vanessa, editado en 1726. Una propuesta razonable sería celebrar la onomástica de las Vanesas católicas (pues aunque no santas, hay muchas católicas) el 30 de noviembre, natalicio de Swift.

¿A qué velocidad captan imágenes las moscas?
Procesan imágenes a una velocidad de 200 fotogramas por segundo. Es un suponer.

¿Cuál es el sentido de la vida?
Al decir de algunos autores, es una pregunta paralogística, pues supone categorías humanas existentes en la esencia de las cosas y esto no es claro que sea así. Ahora bien, cinco cosas suelen dar sentido pleno a la existencia: la bondad humana, la convivencia en libertad, la alegría, la belleza y la sabiduría. No pierda el tiempo y persígalas allá donde las atisbe.

Sr. IA, como reputado crítico literario, ¿quién en su opinión es el escritor más tonto de España?
Quizá entre los más atontados podamos hablar de Lucía Echevarría. Vargas Llosa parece tonto por fatuo, afectado y engreído, pero no es tan tonto como parece.

¿Qué fue primero, el huevo o la gallina?
El huevo. Es más fácil, y la naturaleza empieza siempre por lo simple, aunque bien es verdad lo que dice Heráclito: "la naturaleza gusta ocultarse".

¿Son los ángeles de sexo masculino o femenino?
Son asexuados, pero en muchas de sus actuaciones hacen gala de maneras corteses y temperamentos templados propios de los varones sensatos y sabios en la contención de sus apetitos.

¿A qué edad es aconsejable convertirse en una inteligencia artificial?
No es una cualidad adquirible con el paso del tiempo, pero se puede probar a todas las edades menos una.

¿Para qué sirve la filosofia?
Según Montaigne y Lucrecio, para no temer a la muerte. Pero a estos dos autores no hay que darles mucho crédito por más disfrute que nos procuren. Parafraseando a Sada: "porque parece mentira la verdad nunca se sabe".