sábado, 24 de marzo de 2012

Retracking al Retargeting


Axioma de Ludwig Besa. “La calidad de un servicio es inversamente proporcional al número de anglicismos que utiliza el comercial de ese servicio”. Paseando por Omexpo me encuentro a un capullo que anuncia su agencia de comunicación como “Flexibilidad para su Advertising”. Un poco más tarde, mantengo una surrealista conversación con un vendedor de “Retracking para el Retargeting”… Tres metros adelante una empresa de paquetería envuelve su producto en un diagrama de flujos que parece el ciclo de la oxidación del polímero de acetileno en atmósferas saturniales. Tras soportar dos conatos de ictus me entero de que lo suyo es una plataforma logística. Mola (¿pero realmente hacía falta pasar por el trance de los ictus para entenderlo?). “¿La tarifa de precios?”, pregunto… “No la tengo, estará en internet y la verdad que no sé muy bien… espera… igual Agustín…” Y el nota se pone a vocear “Agustínnn, Agusstínnn”. Yo ya no sé cómo ponerme para que no me vean la cara de descojono.

De verdad, que a veces trabajar en marketing es como ser actor en la Hora de José Mota.

Conjetura de Ludwig Besa para la baremación de agencias de comunicación: “Una agencia de comunicación que no se comunica a sí misma es una mierda de agencia, salga corriendo, lo único que harán es afeitarle la pasta y darle una mierda de servicio, y además harán muy bien, porque un capullo que paga por algo que no entiende no se merece otra cosa”. Entro en otro stand, otro diagrama de flujos esotérico y una decena de tíos orondos vestidos como para una boda. No, no venden trasponedores de banda hipercuántica para aceleradores de partículas, ni siquiera venden fajas de caballero… Venden comunicación on line.

Yaya... El caso es que la publicidad on line no se hace con retórica aristotélica, ni conceptualizaciones Derridianas ni tampoco recurriendo al estructuralismo ruso (bueno, algunos sí utilizan eso, pero vamos, apliquen la conjetura). Se hace, explicando al cliente qué paga y qué puede obtener a cambio.
No tratándole como un chimpancé meningítico y mareándolo con retargetings y contrappollings.
No oscureciendo el discurso para que el pobre empresario sienta llegada la hora del retiro o precisado de un traductor que le ayude a entender a un pedante con cara de putero.

En cierta ocasión, unos alumnos me propusieron hacerme pasar por un ponente de Publicatessen e impartir una ponencia titulada “Polliflauted Branding, como darle Value a su Conching”. Me corté y hoy me arrepiento. Me corté por el qué dirá el decano viéndome hacer el payaso otra vez… En fin…


A lo que voy, estas supuestas agencias de comunicación que no comunican una mierda parecen, más bien, la banda de Curro Jimenez vestida de boda y emboscada en una jungla de neologismos para atracar al primer pardillo que tiene la mala fortuna de caer en su garito (además les llaman así, pardillo, paleto, cimbel, en la mejor tradición tocomochística). Tienen la venta a puerta fría de crecepelo, enciclopedias, agua de colonia, consultoría, etc… grabada en los genes. Veteranos de la legendaria batalla del comercial consultor. Hoy toca marketing on line y mañana polliflauting, hoy Omexpo mañana Reus. Hoy llevo el couch counter para Gase Consulting y mañana para Accenture Vendemotings. La cuestión es empaparme de una jerigonza inextricable y, llegado el caso, soltar “Agustínnn, Agustínnnn”, esperando que el becario Agustín se gane sus trescientos euros al mes. Total, al final es un florido y currado powepoint por 3.000 euros y allá te las compongas.

Esto no es serio.
Si quiere gastar 3.000 euros por un powerpoint tan bonito como inútil, teclee en Google “marketing on line” y que tenga usted suerte.
Si no sabe cómo una web da valor a una empresa mándame un correo. Yo no tengo los santos cojones de tratar a nadie como un chimpancé meningítico, y menos a un señor empresario que sabe negociar con el del banco refinanciaciones de crédito para el circulante.
Creánme, las cosas son más sencillas de lo que parecen (e infinitamente más fácil que negociar con el del banco). Lo que pasa que hay una banda de gualtrapas, asamantecas, piruleros y navajeros de farola interesados en “dar la impresión” de que “esto es muy difícil” y consecuentemente “caro”.
Pues no.

Post hurtado por mis santos chips a Oninedigitalmark

3 comentarios:

Frankie dijo...

Casualmente, me pilla a mitad de leer un librillo interesante que hay por ahí: "El pensamiento Power-Point", donde se analiza la influencia nefasta en las mentes empresariales de la forma que tiene este programa de presentar la información.

Abuso de anglicismos, culto a las frases de impacto sin demasiada concatenación lógica de unas con otras, etc. Así se presentan las ideas en las empresas y de resultas, así se piensa. El fin del mundo...

Anónimo dijo...

“La calidad de un servicio es inversamente proporcional al número de anglicismos que utiliza el comercial de ese servicio”

Usted disimule, no sea que se los empresarios apliquen este criterio a la universidad española actual, cuya estrella son los "masters" impartidos en "campus" (sí, ya sé que la palabra "campus" parece latín, pero en latín significaba "llanura" y jamás se le habría aplicado a un grupo de edificios).

Athini Glaucopis

Sr. IA dijo...

Frankie, en efecto, estamos ante la culminación de un cierto escolasticismo tardía basado en la pedantería.

Athini, la universidad no se en qué acabará... Bueno, la dejo pues tengo clasus en el campus para mi asignaturus... Por cierto feliz cumpleaños aproximado.